Objectives:
To describe
food consumption frequency in
adolescents in the context of the financial crisis in 2012, and to analyse potential fluctuations in excess
body weight between 2008 and 2012.
Method:
A
cross-sectional study of
eating habits and excess
body weight was conducted in
adolescents aged 13 to 19 years old from public, subsidised and private
secondary schools in Barcelona,
Spain. The FRESC
lifestyle risk factors survey was used, and
food frequency
consumption,
food recommendations and
body mass index were analysed according to
gender, year of
education and
socioeconomic status.
Results:
Girls ate
vegetables and
fruits more frequently than
boys, while the
prevalence of junk
food consumption was higher in
boys. The
prevalence of
compliance with
food recommendations was lower than 50% for all
foods, and
gender and socioeconomic differences were found for
eggs,
red meat and
soft drinks. Regarding excess
body weight,
boys had a higher
prevalence than
girls in the 2 years analysed. Furthermore, a reduction in excess
body weight was observed among
girls in
secondary education in the highest socioeconomic groups (28.7% [95% CI 24.8-32.6%] in 2008 to 20.5% [95% CI 17.1-23.8%] in 2012).
Conclusions:
The
prevalence of
adolescents following
food recommendations is low, and
gender differences were found in terms of
food consumption frequency, even in the context of financial crisis. There is a need to promote programmes and
policies to reduce inequalities related to
eating habits and excess
body weight in
adolescents (AU)
Objetivos:
Describir la frecuencia de
consumo de alimentos en
adolescentes en un contexto de crisis económica en el año 2012, y analizar los potenciales cambios en el exceso de peso entre los años 2008 y 2012.
Diseño:
Estudio transversal de los
hábitos alimentarios y el exceso de peso en
adolescentes de entre 13 y 19 años de edad pertenecientes a
escuelas públicas, concertadas y privadas de Barcelona. Se utilizó la
encuesta FRESC sobre
factores de riesgo asociados a estilos de
vida y se analizaron, según
sexo,
curso académico y
nivel socioeconómico, las frecuencias de consumo, recomendaciones alimentarias e
índice de masa corporal.
Resultados:
Las
chicas realizaban un mayor consumo de
frutas y
verduras, mientras que los
chicos consumían comida no saludable con mayor frecuencia. La
prevalencia de cumplimiento de las recomendaciones alimentarias es inferior al 50% para todos los
alimentos, y se encontraron diferencias según el
sexo y el
nivel socioeconómico en el consumo de
huevos,
carne roja y
refrescos. En relación al exceso de peso, la
prevalencia fue mayor en los
chicos que en las
chicas en los 2 años analizados. Además, se observó una reducción del exceso de peso en las
chicas cursando
Educación Secundaria Obligatoria y de
nivel socioeconómico alto (de 28,7% [IC95% 24,8-32,6%] en 2008 a 20,5% [IC95% 17,1-23,8%] en 2012).
Conclusiones:
La
prevalencia de
adolescentes que siguen las recomendaciones de consumo es
baja. Hay diferencias de
sexo en las frecuencias de consumo de los
alimentos, incluso en un contexto de crisis económica. Existe una necesidad de promover programas y
políticas para reducir las desigualdades relacionadas con los
hábitos alimentarios y el exceso de peso en los
adolescentes (AU)